José Luis Caldero López, superintendente de la Policía (Archivo).
AGUADILLA: Luego de un lunes sangriento, que produjo tres asesinatos y una persona herida, el superintendente de la Policía, José Luis Caldero López, se trasladó el martes a esta ciudad del noroeste para discutir la seria situación de seguridad allí, que ha provocado un aumento de nueve asesinatos, en comparación con el pasado año.
En lo que va de año, se han reportado 16 muertes violentas en la región de Aguadilla.
Se adelantó que como parte de las medidas para atender la crisis, se asignaron agentes de la División de Operaciones Tácticas (DOT), para patrullar en turnos de 12 horas en sectores de mayor incidencia.
También se dispuso de tres guaguas para los agentes de la DOT y unas 10 motoras adicionales para participar del patrullaje.
Un doble asesinato ocurrió cerca de las 8:00 de la noche, en los predios del residencial Las Muñecas, aproximadamente unas cuatro horas después de que agentes de la División de Drogas de Aguadilla arrestaran a seis individuos y confiscaran drogas, dinero y dos automóviles en el punto de drogas del lugar.
Las víctimas fueron identificadas como los hermanos Justin y Jessie Castro Rodríguez, de 20 y 26 años, respectivamente. Un herido responde al nombre de Christian Cabán Ortiz.
Por otro lado, a las 10:57 de la noche, detrás de la Iglesia Católica del centro del pueblo de Aguadilla, fue asesinado de un tiro en la cabeza Javier Josué Hernández Hernández, de 30 años. Este sujeto tenía “record” por asesinato, armas y drogas.
