Reconocida a nivel internacional como la sede del Convento Porta Coeli y de otras edificaciones históricas que atraen anualmente a miles de visitantes, el municipio de San Germán también ostenta con orgullo el nombre de «Ciudad Fundadora de Pueblos» y cuna de la insigne poeta Lola Rodríguez de Tió. En cada calle de la Ciudad de Lomas, trasciende todo un legado de historia, música y poesía, aparte de reclamar con justa causa que San Germán es la cuna del deporte de Baloncesto Superior en Puerto Rico.
Sin embargo, tanta belleza y ofrecimiento turístico lo ensombrece en la actualidad el sinnúmero de estructuras abandonadas que constituyen un borrón en la llamada zona histórica de la ciudad sangermeña. Sin únimo de provocar molestias a quienes pudiesen sentirse ofendidos, es hora ya que las autoridades municipales y el alcalde Isidro Negrón Irizarry, tomen medidas urgentes para que no continúe la proliferación de casas y edificios en ruinas.
En muchos de los casos se trata de propiedades que han sido dejadas en el abandono por sus dueños o que forman parte de algún litigio en los tribunales. Sea cual fuese el motivo, compete al gobierno municipal declarar dichas estructuras como «estorbo público» y proceder a la demolición. De otra parte si alguna de esas edificaciones es de valor histórico, que se complete un proceso de expropiación forzosa.
Es una lástima que en una ciudad de tanta belleza, sus residentes tengan que observar a diario el feo espectáculo de estructuras que son foco de sabandijas y sirven de guarida a sujetos antisociales e individuos sin hogar.
