Editorial: Alto ya al terror que impera en el Camino Justiniano

Las llamas consumen el lunes en la madrugada otra residencia localizada en el Camino Justiniano de Mayaguez (Foto Facebook).

Uno de los incendios provocados por el llamado «Terror de Justiniano» en el Camino Justiniano de Mayagüez (Archivo).

MAYAGÜEZ: Como si se tratase de un asunto de menor importancia las autoridades policíacas de esta ciudad parecen estar perdiendo la batalla en la búsqueda del llamado «Terror de Justiniano», que desde hace varios meses mantiene profundamente preocupados a los residentes de ese sector de la Sultana del Oeste.

Luego de una pausa de varios días, el peligroso delincuente que se dedica a quemar estructuras y a lanzar  piedras contra residencias y autos localizados en el Camino Justiniano, volvió a estar implicado en otro incendio sucedido en la madrugada de este jueves.

Como reseñamos hoy en LA CALLE Digital, el presunto piromaníaco causó serios daños durante la madrugada a otra vivienda que al momento de los hechos estaba deshabitada, pero en cuyas inmediaciones enclavan otras casas ocupadas por familias  que reclaman  vivir en paz y tranquilidad.

La situación que ocurre en el Camino Justiniano, amerita el despliegue de todos los recursos investigativos de la Uniformada y el CIC  para dar con el paradero del individuo que al presente continúa burlándose de los funcionarios responsables de imponer la ley y el orden. A no ser por el patrullaje preventivo que llevan a cabo los efectivos de la Policía Municipal  de Mayagüez, los vecinos de esa humilde comunidad estarían en total desamparo, esperando que la alta oficialidad de la Policía Estatal les atienda y proteja.

Desde estas páginas hacemos un llamado urgente al superintendente de la Policía, coronel José Luis Caldero, para que le conceda atención inmediata a la búsqueda y eventual captura del llamado «Terror de Justiniano».  Confiamos en la capacidad de dicho funcionario para dirigir el operativo que le devuelva la tranquilidad a esas familias mayagüezanas.  No olvidemos que la paciencia tiene un límite… ¡Alto al abuso, ahora!

Lo insólito del caso es, que no obstante la gravedad que reviste el problema, la Oficina de Prensa de la Comandancia de Mayagüez, no había hecho público un solo informe de novedades en cuanto a este delicado asunto, hasta hoy jueves que emitió un escueto informe sobre el más reciente incidente.

Julio Víctor Ramírez-Torres, Editor