Apelativo confirma convicción por actos lascivos contra exalcalde de Cidra «Wiso» Malavé

El convicto exalcalde de Cidra, Angel "Wiso" Malavé (Archivo).

El convicto exalcalde de Cidra, Angel «Wiso» Malavé (Archivo).

SAN JUAN: El Tribunal de Apelaciones confirmó la sentencia que el Tribunal de Primera Instancia dictó en el 2013 contra el convicto exalcalde de Cidra, Angel “Wiso” Malavé Zayas, quien cumple una condena de nueve años, tras ser hallado culpable por delitos de actos lascivos contra cinco empleadas de la Administración Municipal cidreña.

“Forzoso en concluir que el Ministerio Público probó en todas y cada una de las acusaciones que el apelante (Malavé) cometió los delitos de actos lascivos. Al apelante no se le violó su derecho a un juicio justo e imparcial. En este caso, no tenemos duda alguna de que el Estado probó su caso más allá de duda razonable. En ausencia de pasión, prejuicio, parcialidad o error manifiesto, estamos impedidos de intervenir con la apreciación de la prueba del Jurado que tuvo la oportunidad de escuchar y ver a los testigos declarar. La norma de deferencia a la apreciación de la prueba por parte del Jurado en este caso es debida”, indicó el panel apelativo en su sentencia, que fue certificada por la secretaria del Tribunal, la licenciada Dimarie Alicea Lozada.

El panel de jueces estuvo compuesto las juezas Aleida Varona Méndez, María del Carmen Gómez Córdova y Mirinda Vicenty Nazario. La juez ponente en la sentencia apelativa lo fue la jueza Vicenty Nazario.

Según la sentencia del Tribunal de Primera Instancia, el exalcalde Malavé Zayas debe cumplir una condena de nueve años, siete meses y nueve días. De esta sentencia, Malavé tenía que estar un año en restricción domiciliaria y el resto del tiempo bajo el sistema de libertad a prueba.

“Durante el juicio se desfiló evidencia directa contra el apelante. Los testimonios de las víctimas (…) fueron explícitos, contundentes y detallados en cuanto a los actos de contacto carnal que les realizó el apelante. Si bien es cierto que las perjudicadas tardaron mucho tiempo en informar lo sucedido, no podemos perder de perspectiva que el victimario era el líder máximo de su lugar de trabajo, el alcalde del Municipio de Cidra. Todas sintieron temor y vergüenza al analizar lo que les había sucedido”, señala otra parte de la sentencia.