El Oeste se prepara para recibir a miles de visitantes

CABO ROJO:  En espera de que unas 250 mil personas pernocten en la parte oeste de la isla durante el largo feriado del 25 de julio, los gobiernos municipales de este litoral donde ubican las playas y lugares de veraneo tradicionalmente visitados por turistas internos, mantienen activos los planes de seguridad y vigilancia preventiva para lograr que las familias disfruten a plenitud de estos días de asueto. En el caso particular del alcalde de Cabo Rojo, Roberto (Bobby) Ramírez Kurtz, este indicó el lunes, que todos los recursos de su administración están preparados para recibir a los residentes de todas las áreas del país que acostumbran a quedarse en Boquerón, El Combate, Playa Azul y en las diferentes hospederías del municipio.

El  primer ejecutivo municipal adelantó que se han habilitado vías alternas para facilitar el movimiento de vehículos desde y hacia los diferentes sectores de Cabo Rojo. Unidades de la Policía Municipal en coordinación con la Uniformada Estatal, mantienen activado el plan de contingencia para lograr que los visitantes lleguen a los balnearios, playas, hoteles y restaurantes sin mayores inconvenientes. Se espera no obstante, la colaboración de la ciudadanía para proteger y velar por la seguridad de los niños que estos días acompañarán a sus padres y tutores durante estos días de vacaciones. Se le recuerda a los conductores que es delito manejar bajo los efectos de bebidas alcohólicas. Evite accidentes, pase la llave.

De nuevo preguntamos: ¿ qué nos pasa Puerto Rico?

Es gratificante que la gente disfrute y comparta en esos lugares con sus familiares y amigos. Sin embargo, divertirse sanamente es una cosa y cumplir con la responsabilidad de mantener nuestras playas y balnearios limpios es otra obligación que en circunstancias normales no sería necesario recordárselo al ciudadano que ama a su patria.

Horroroso es el espectáculo dejado en muchas playas y balnearios del país visitados durante el pasado fin de semana por los miles de bañistas que acudieron a celebrar la tradicional Noche de San Juan. Cientos de toneladas de basura, fue el «regalo» dejado por una «trulla» de irresponsables que  no profesan el menor respeto a sus conciudadanos.

Mientras muchas familias fueron cuidadosas al momento de retirarse de los sitios donde estuvieron festejando el feriado de San Juan Bautista y  echaron en fundas plásticas los desperdicios sólidos, otros menos comprometidos con la belleza de nuestra isla, dejaron un «corral de puercos» en sitios que la ley obliga a mantenerlos limpios.

En repetidas ocasiones la gente se queja de que el gobierno es muy riguroso imponiendo leyes, pero son los mismos individuos quienes forzan al estado a implementar medidas drásticas. Quizás, muchos de los que regresaron a sus hogares el domingo luego de dejar un vertedero en las playas y balnearios, no se han puesto a meditar por un minuto, si a ellos les gustaría que le dejaran su casa asquerosa después de una fiesta familiar.

Pues eso mismo sucede con Puerto Rico. Borinquen es nuestro hogar, nuestra tierra y el hogar de nuestros hijos. Si nosotros no la cuidamos para esta y las futuras generaciones, es porque nos da lo mismo que el hogar donde habitamos se nos caiga encima  Una vez más, ¿ qué nos pasa Puerto Rico?.