En un intento por superar la crisis económica que aqueja a muchos profesionales de la isla, el famoso actor, músico y motivador humorístico Silverio Pérez, recurrió en días recientes a la protección del Tribunal Federal de Quiebras, tras aceptar que no puede cumplir con obligaciones financieras ascendentes a $1 millón. Silverio, cuyo nombre de pila es Silverio Pérez Figueroa, está amparándose en el Capítulo 11 de la Ley de Bancarrota, lo que le permitirá reorganizar las finanzas y así poder negociar con los acreedores.
De acuerdo a documentos publicados en los diferentes medios, Silverio admite tener activos por $500 mil, pero las deudas duplican sus ingresos. El también ingeniero químico, reporta compromisos mayores con instituciones bancarias y alega deber $3 mil en tarjetas de crédito.
La decisión de Silverio de declararse en quiebra, tomó por sorpresa a muchos de sus amigos y allegados quienes entendían que el artista es uno de los mejor pagados en el ambiente y a diferencia de otros obreros del arte tiene trabajo durante todo el año.