PONCE: Lo que preliminarmente fue investigado como un incidente de homicidio y suicidio, tomó un giro inesperado esta semana, cuando el Instituto de Ciencias Forenses concluyó que las muertes de una anciana de 73 años y su hija adoptiva Ramona, de 45 años, ocurrieron en medio de asesinatos perpetrados por uno o más individuos. Los hechos se remontan al 27 de diciembre del año pasado en la calle B-53 de la Barriada Ferrán de Ponce, luego que vecinos del sector percibieran un fuerte hedor que procedía del domicilio de las féminas.
Tras las averiguaciones de rigor, los investigadores entendieron que se trataba de un caso de asesinato y suicidio, donde la hija adoptiva de doña Inés era señalada como responsable de ultimar a la septuagenaria y luego cometer suicidio. Sin embargo, la pesquisa policial no terminó allí porque aún faltaban muchas interrogantes que aclarar.
Incluso, para los vecinos de doña Inés y su hijastra Ramona, la teoría del crimen y suicidio no resultaba creíble ya que las mujeres siempre compartían tranquilamente. Establecida la nueva versión del doble asesinato, agentes de la División de Homicidios del CIC en el Area Sur y el Fiscal Adalberto Flores, trabajan para localizar a una persona que visitaba frecuentemente a la anciana y a su hija. Trascendió, que el individuo será citado como «persona de interés».