Los macabros feminicidios de esta madrugada en Villalba y Guayama

REDACCIÓN: El primero de los trágicos feminicidios ocurridos el domingo ocurrió en Guayama, cuando Lisalee Escalante Espada, de 28 años, madre de tres niños de 7, 9 y 11 años, fue asesinada esta madrugada por su pareja Luis David Rodríguez Vázquez, con quien llevaba una relación de 10 meses y que tenía licencia para portar armas.

Según la nota publicada por El Vocero, la joven, que era vecina de la urbanización Chalets Brisas del Mar, se encontraba en el asiento delantero de un Nissan, que era conducido por una amiga.

Se alega que había ido a la casa en que convivía con Rodríguez Vázquez, localizada en la calle 16 de la urbanización Jardines de Guamaní, donde hubo una discusión.

El asesino le disparó a Escalante Espada y la alcanzó en la cabeza. La amiga, que no fue identificada, la llevó hasta la sala de emergencias de un hospital, pero la mujer murió en el camino.

Desde el hospital alertaron a la Policía.

Rodríguez Vázquez fue puesto bajo arresto a las 6:00 de la mañana en la calle San Miguel del barrio Corazón.

Comerciante de Villalba asesina a su esposa tras 30 años de casados

En el segundo caso reportado hoy, el comerciante villalbeño Luis Raúl Santiago Alvarado fue al amanecer al cuartel de Juana Díaz para entregarse tras asesinar de un disparo en la cabeza a su esposa, la contable Mildred Beatriz Colón Bonilla, con quien llevaba casado 30 años.

El feminicida entregó una pistola con dos cargadores.

El Vocero informó que los agentes de inmediato pusieron bajo arresto a Santiago Alvarado, de 51 años, apodado “Luisito Cousing”, y fueron a la residencia del comerciante en el barrio Romero de Villalba, donde hallaron el cadáver de la mujer, de 50 años, tendido en la cama cubierto con una sábana.

Santiago Alvarado es dueño de varios negocios y se dedica a vender aluminio y a fabricar ventanas. Su esposa era la contable de las empresas. Eran padres de dos hijos adultos.

 El feminicida tiene licencia para poseer y portar tres pistolas.

[COLUMNA] Alzando la voz por las potenciales víctimas de feminicidios

Por Marimer Lanza González-Rodiles

Hoy amanecimos con dos noticias horribles, dos mujeres asesinadas por sus parejas, una de 30 años de casada, y la otra con 10 meses de relación.

He leído varios comentarios de que ellas algo tuvieron que haber hecho para provocar este desenlace tan horrible.

Entonces yo debo entender que, según ese tipo de comentarios, pues justifica que las mujeres maten a los hombres de igual manera por todo lo que le hacen a las mujeres. Bueno sería así si lo vamos a medir con la misma vara.

¿Cuándo?? ¡Cuándo van a entender que nadie es propietario de nadie!

¡Cuando van a entender que, si ya no hay amor, que, si ya no funciona, que sea por la razón que sea, deben respetar la decisión y ya!

Existen personas que están obsesionados con sus exparejas, aunque tengan amantes o nuevas parejas.

Hay personas que se mudan cerca para seguir velando a sus ex, se meten en el trabajo para velarlas o intimidarlas.

Mandan a personas cercanas a velarlas, a escribirle en sus redes sociales y hasta enviarles mensajes de texto.

Y hasta sus nuevas parejas y amigas se prestan para ese juego.

Las víctimas de maltrato que logran salir de ese patrón viven bajo un miedo constante. Tienen que estar con cuatro ojos para poder estar relativamente tranquilas.

¡Y les digo esto porque sé lo que es y porque lo vivo a diario!

Si a mí o alguien de los míos le pasa algo, a mis personas más cercanas, les he dado toda la información necesaria para buscar a la o las personas que hayan tenido que ver con lo que pase. Nombres, fotos, direcciones, teléfonos y tablillas.

A mis “amistades” que son los “lleva y trae”, a los que les ríen las gracias, espero que se hayan dado cuenta que sé quiénes son cada uno de ustedes. Y se han podido dar cuenta que de todos me he alejado.

Espero que nunca me pase nada a mí, ni a los míos, porque ustedes, si les queda algo de conciencia, le va a pesar mucho hasta el último día de vida que les quede.

¡Ni una menos!

[YAUCO] “Celos” fueron aparente móvil de asesinato y suicidio de esta madrugada

YAUCO: Los celos fueron el aparente móvil de un caso de asesinato y suicidio, en medio de un incidente de violencia doméstica, ocurrido a las 4:00 de la madrugada del lunes, en una casa localizada en el sector Ciénaga, en el barrio Barinas de esta municipalidad del suroeste.

Según datos que han circulado durante la tarde, la víctima fue identificada como Roselly Cintrón Torres. Mientras que el asesino fue el esposo de la infortunada, José Román Cintrón, un empleado de una fábrica de pinturas ubicada en Guayanilla. Ambos tenían 39 años.

El sujeto se quitó la vida después.

El crimen ocurrió en presencia de un menor de 13 años, que sufre de varias condiciones médicas que lo mantienen confinado a una silla de rueda.

Se alega que aunque la pareja no tenía historial previo de casos de violencia doméstica, tenían problemas por presuntos arrebatos de celos del marido.

El arma que usó Román Cintrón para ultimar a su esposa y luego suicidarse, fue ocupada en la escena del crimen. Trascendió que había sido obtenida de forma ilegal por el marido.

El primer informe que circuló la Policía señalaba que se creía que se trataba de un caso médico, pero al llegar familiares a la vivienda, encontraron el cadáver de Roselly presentando heridas de bala, mientras que el cuerpo de su asesino estaba en otro cuarto.

Con este, van seis feminicidios ocurridos en la Isla en lo que va de año.