MAYAGÜEZ: Las autoridades informaron que el chofer de ambulancias que provocó un accidente fatal en octubre pasado, en el que murió una jovencita de 15 años, enfrenta una orden de arresto con medio millón de dólares de fianza, luego de que se negara a regresar a Puerto Rico a enfrentar juicio.
Se trata de Arístides Castellanos González, de 33 años, quien mientras manejaba una ambulancia propiedad de la empresa “First Class” cuando al llegar a la intersección de la carretera PR-2 y la 342, chocó un carro Toyota Corolla de 1993, que manejaba Wilmarie Nieves Cruz, que cruzaba la intersección con la luz verde a su favor. Se alega que el chofer Castellanos González aceleró sin presuntamente tomar las debidas precauciones.
LA CALLE Digital supo que luego del accidente, Castellanos González se fue a los Estados Unidos.
El día del choque, la conductora Nieves Cruz resultó gravemente herida y fue referida en ese momento en condición crítica al Centro Médico de Río Piedras.
Su hija, Keyla Arvelo Nieves, de 15 años, quien iba como pasajera del Toyota, murió en el accidente al quedar pillada, sufriendo heridas de gravedad. Una niña de 9 años, que iba en la parte posterior del Toyota, sufrió heridas de cuidado, por lo que entonces fue llevada en ambulancia aérea al Centro Médico de Río Piedras.
De la investigación de la División de Patrullas de Carreteras de Mayagüez surgió, y fue confirmado por el teniente Gualberto Cruz Avilés, que el chofer no tenía el permiso de la Comisión de Servicio Público (CSP) para conducir ese tipo de vehículo y ni siquiera aparecía en los récords de la agencia.
No obstante, se aclaró que la empresa First Class, propietaria de la ambulancia, tenía permiso de la CSP.
Durante una entrevista con LA CALLE Digital, el teniente Cruz Avilés dijo que, aunque se esté manejando una ambulancia en una situación de emergencia, el chofer está obligado a cumplir con las leyes de tránsito, tomando las debidas precauciones.