Tratándose del oficial de mayor rango en la Policía de la Región de Mayagüez, era de esperarse que el Teniente coronel Francisco Carbó Marty, se presentara al velatorio del Sargento Abimael Castro Berrocales, luciendo el uniforme que lo acredita como Jefe de la Uniformada en esta parte de la isla. Sin embargo, Carbo Marty, provocó disgusto entre sus compañeros de la Fuerza, ya que vestía de manera informal y sin la gorra de teniente coronel.
» Ese es el aprecio y respeto que este señor sentía por el sargento Castro Berrocales y por todos los policías que trabajan en el Area de Mayagüez», comentó un ex agente, visiblemente molesto. Tras acudir a la Funeraria Martell, donde el sargento Castro Berrocales, permanece en capilla ardiente, Carbó Marty, le extendió la mano al Alcalde de Mayagüez José Guillermo Rodríguez, pero declinó saludar a este periodista.
Como es de conocimiento público, el flamante oficial policiaco que ha gozado de la «bendición» de varios superintendentes de la Policía, nunca perdonó nuestros escritos en EL VOCERO, cuando se le investigó por violarle los derechos civiles a la familia Miranda, del Residencial Cuesta Las Piedras de Mayagüez. Aún con ese expediente poco positivo en su carrera, Carbó Marty consiguió ser ascendido hasta el rango actual.
Entendemos que el mejor homenaje póstumo que el señor Francisco Carbo Marty, puede ofrecerle al sargento Abimael Castro Berrocales, es disculparse con todos los agentes y uniformados bajo su responsabilidad, explicando porqué en la noche de fin de año permitió que el sargento patrullara sin la ayuda de otro compañero. Además, que expliqué porqué casi toda la flota de la Policía en la región de Mayagüez, se halla en pésima condición mecánica y solo algunos vehiculos en buen estado son para uso exclusivo de sus oficiales más allegados
Por último, que Carbó Marty, aclare de manera diáfana, si el sargento Castro Berrocales no pudo activar la cámara del auto-patrulla porque estaba averiada, o él, como el oficial de mayor rango, no le notificó al superintendente Emilio Díaz Colón, que el sistema «sencillamente, no sirve». Don Francisco Carbó Marty, luego de responder a estas interrogantes, preséntese al sepelio del Sargento Abimael Castro Berrocales, quien seguirá siendo un verdadero orgullo para la Policía de Puerto Rico.