Por: Catalina Carrasco, Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EE. UU., Distrito de Jacksonville
En septiembre del 2017, el huracán María azotó a todo Puerto Rico causando destrucción y daños significativos a través de la Isla. Tras su paso devastador, la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) activó de inmediato al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (USACE por sus siglas en inglés) para iniciar sus funciones establecidas por ley como coordinador de FEMA para el sector de Obras Públicas e Ingeniería.
En respuesta a la declaración de emergencia nacional y a las directrices de FEMA, la oficina de las Antillas del USACE, localizada en San Juan, activó sus empleados a dos días de la emergencia. A este equipo se le unieron sobre 40 voluntarios de USACE, de diferentes partes de los Estados Unidos, quiénes comenzaron a reportarse a la Isla apenas cuatro días después del paso del huracán para, junto al equipo local, trabajar en diferentes misiones incluyendo la de inspeccionar 17 represas identificadas por el gobierno local como de alto riesgo y/o cuya integridad estructural pudo ser afectada tras el paso del huracán María.
Entre las represas identificadas como de alto riesgo, se encontraba la estructura de almacenamiento de agua más importante del área noroeste de Puerto Rico, el embalse Guajataca. Sin embargo, el embalse propiedad de la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico (AEE) y que almacena el agua distribuida en gran parte del noroeste de la isla, no tuvo su turno de inspección por USACE antes de que el 23 de septiembre del 2017 comenzara a dar indicios de un fallo potencial del aliviadero causado por la precipitación sin precedente registrada en la cuenca del lago Guajataca. La erosión causada por el desbordamiento continuo del aliviadero y la fuerza del agua destruyó parcialmente la estructura de concreto, la tubería principal que suministraba agua desde el embalse hasta la planta de tratamiento de agua potable y causó daños significativos a las compuertas de la represa.
Ante la preocupación de un fallo del aliviadero, el grupo de voluntarios de USACE inspeccionó las condiciones de inmediato y se unió al equipo de agencias locales y federales que evaluaron la situación y establecieron soluciones para proceder a las reparaciones necesarias que evitarían un colapso; la directriz de FEMA no tardó en llegar a USACE.
Inmediatamente USACE procedió a solicitar apoyo de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, quiénes utilizando helicópteros, procedieron a instalar barreras de concreto y sacos de arena («supersacks») al pie del aliviadero para estabilizarlo y controlar el riesgo inmediato. Además, FEMA pidió al USACE que instalara y operara bombas para mantener los niveles de agua en el embalse seguros para la población aguas abajo de la estructura, mientras se continuaba suministrando agua a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Rico (AAA) para distribución a los siete municipios que se suplen del lago.
«Más de diez agencias locales y federales, así como personal militar, apoyaron la misión de emergencia para estabilizar el aliviadero, el éxito de la operación se debió a su rápida respuesta y su voluntad de colaborar para lograr el objetivo en común», dijo la Ingeniera de Área de USACE para las Antillas, Ing. Maricarmen Crespo. «La rápida acción de USACE al solicitar apoyo de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos y la respuesta inmediata de ellos para entregar material a la represa evitó una posible catástrofe».
Las medidas establecidas de inmediato como respuesta a la emergencia redujeron el riesgo de falla inminente del aliviadero, sin embargo las condiciones en el momento presentaban un riesgo de fallo durante un desastre natural en el futuro. En su capacidad de asesor técnico para FEMA, USACE recomendó la implementación de medidas temporales adicionales que fueron aceptadas; la ejecución de seis medidas destinadas a reducir el riesgo y proteger a las comunidades aguas abajo de la represa Guajataca fue autorizada, en espera de las reparaciones permanentes. La implementación de dichas medidas se logró a través de cuatro contratos adjudicados a un contratista local y a otros pequeños negocios, con un costo de más de $20 millones.
Para diciembre del 2018, se completaron cuatro de las medidas temporales. En ese momento, la AEE y la AAA retomaron el control total de las operaciones de suministro de agua. Se espera que las medidas temporales restantes se completen en el 2019.
Cada aspecto de los trabajos en Guajataca, incluyendo coordinación y toma de decisiones, ha sido un esfuerzo de equipo entre FEMA, AEE, AAA, USACE y la Agencia de Manejo de Emergencias de Puerto Rico. «Estamos trabajando mano a mano con AEE y AAA, comunicándonos a diario, asegurando que todo el trabajo se complete de manera segura y puntual», dijo el Ingeniero Residente de la Oficina de USACE en las Antillas, ingeniero Wilmer Varela. «Reconocemos la importancia que tiene este proyecto y la mejor manera de lograrlo es trabajando como un solo equipo».
Para controlar el riesgo de una falla total del aliviadero y de la represa durante los trabajos de reparación, USACE recomendó a la AEE mantener el nivel de agua del embalse en 192.5 metros durante la temporada de lluvia y 194.25 metros durante la temporada seca. Sin embargo, en el 2019 los niveles del embalse nunca superaron los 193 metros debido a las condiciones climáticas locales y la baja precipitación que históricamente se registra entre los meses de octubre a marzo en la cuenca del Guajataca.
USACE, como asesor técnico y agente de construcción de FEMA, continúa proveyendo soluciones técnicas y apoyando el equipo interagencial con el objetivo de proteger la vida de la población río abajo y mantener la integridad de la represa. La AEE y la AAA siguen a cargo de la toma de decisiones operacionales y de mantener informado al público sobre los cambios en niveles de agua del embalse y/o apertura de compuertas para descargas en caso de aviso de inundaciones. La AEE, es la agencia propietaria y operadora de la represa responsable de proveer agua cruda a las plantas de la AAA, quien a su vez es responsable del tratamiento, distribución y suministro de agua potable a sus clientes. El USACE ejecuta sus funciones bajo la dirección de ambas agencias siguiendo sus procedimientos y requisitos operacionales.
La falla de la represa de Guajataca sería catastrófica para la seguridad y el bienestar de la población local y para la economía del área noroeste de la isla y de Puerto Rico en general. Por esta razón, la AEE ha notificado a USACE que su prioridad es evaluar la integridad de la represa para determinar las condiciones actuales y el ámbito de trabajo requerido para proceder con las reparaciones permanentes una vez que las medidas temporales se hayan implementado en su totalidad. La AEE solicitó la asistencia técnica de USACE para realizar un análisis de riesgo de la represa y todos los estudios necesarios para desarrollar el diseño y la construcción de una solución permanente.
Se estima que el costo total de los trabajos de reparación será de cientos de millones de dólares. En este momento, FEMA está en proceso de establecer un mecanismo para financiar parcialmente la primera fase que incluye completar el análisis de riesgo y otros estudios.
El trabajo en la represa de Guajataca es uno de varios proyectos de control de inundaciones que USACE está construyendo en la isla. USACE tiene vasta experiencia en el diseño y construcción de proyectos de control de inundaciones en Puerto Rico, incluyendo las represas Portugués y Cerrillos, que han probado reducir el impacto de las inundaciones antes provocadas por los ríos Portugués y Bucaná en Ponce.
«El Cuerpo de Ingenieros tiene profesionales expertos en la materia, muy capacitados, y comprometidos», dijo la ingeniera Brenda E. Calvente, gerente de Proyectos del Distrito de Jacksonville. «Nos sentimos orgullosos y honrados de ser parte de este esfuerzo y de continuar proveyendo soluciones duraderas que beneficien a Puerto Rico».
La autora es especialista de Asuntos Públicos del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos, Distrito de Jacksonville.