CABO ROJO: La coalición de organizaciones comunitarias, ambientales y profesionales que integran el grupo ¡Defiende a Cabo Rojo! Denunció lo que catalogó como “las múltiples irregularidades que caracterizaron el proceso de vistas públicas celebradas por la Oficina de Gerencia de Permisos (OGPe) los días 6, 7, 13 y 18 de marzo de 2025”, en torno a la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del controversial megaproyecto de lujo “Esencia”.
Según el colectivo, desde su anuncio el pasado 4 de febrero, el proceso fue “apresurado, confuso e injusto”.
Se concedió un plazo de apenas 30 días para analizar un documento técnico de miles de páginas, lo que generó indignación y movilización comunitaria.
“El 18 de febrero, solicitamos formalmente un cambio de lugar ante la previsión de insuficiencia de espacio. La OGPe no respondió. Desde la mañana del primer día, la sala estaba llena y una larga fila de ciudadanos esperaba afuera bajo el sol. Instalamos carpas con sombra, agua y meriendas, pero la cantidad de personas superó nuestras capacidades, afectando especialmente a adultos mayores, niños y personas con condiciones de salud”, reveló Defiende a Cabo Rojo en declaraciones escritas.
Recordó el grupo que la Policía Municipal “desplegó un operativo amplio, implementando su propia lista de asistencia y requiriendo identificación y cateo. Solo una puerta daba acceso a la sala de vistas en el tercer piso, lo que retrasó la entrada. Mientras tanto, los proponentes del proyecto ingresaron sin demora, escoltados y con almuerzos asegurados en la cafetería de la alcaldía”.
“El proceso de solicitud de turnos fue confuso y limitante desde el inicio. La lista de la OGPe para expresarse estaba en el tercer piso y se removía poco después de las 10:00 de la mañana, dejando fuera a quienes llegaban de lejos. Aun así, cerca de 100 personas solicitaron turno para expresarse en oposición al proyecto y hubiesen sido muchos más, pero los oficiales examinadores de la OGPe, liderados por el licenciado Miguel Mihaljevich de Jesús, se negaron a abrir más espacios en las tardes ni durante los días adicionales”, apuntó Defiende a Cabo Rojo.
Otras irregularidades las desglosaron en:
- Los examinadores interrumpían a ciudadanos.
- Pedían modificar ponencias para acelerar el proceso.
- Salían de la sala, usaban celulares e incluso se dormían.
- La transmisión en vivo del municipio de Cabo Rojo tenía un audio deficiente y la pantalla externa no permitía escuchar nada.
De las ponencias presentadas luego de las de los proponentes, sólo tres apoyaron el proyecto. Entre estos Roberto Cacho, desarrollador; Virgilio Olivera, alcalde de San Germán; y Jorge Morales, alcalde de Cabo Rojo.
“Todas las demás presentaciones ciudadanas y expertas fueron contundentemente en contra de “Esencia”, incluidas intervenciones de arqueólogos, científicos, ecólogos, ingenieros, planificadores, miembros de sectores religiosos, pescadores, artistas, educadores, agricultores, niñas y líderes comunitarios”, añadió la organización.
La coalición destaca que el proyecto ha sido rechazado por especialistas de renombre como el arqueólogo Reniel Rodríguez, la oceanógrafa Michelle Scharer, los planificadores Luis García Pelatti y Pedro Cardona Roig; el geólogo Ángel Alicea, y los ecólogos Ariel Lugo, Dimaris Acosta, Rafael Joglar y Héctor Quintero Vilella.
También se enviaron a la OGPe más de 100 comentarios escritos en oposición al proyecto, mientras que la petición internacional para detener “Esencia” ha recogido más de 33,300 firmas.
Además, durante las vistas se documentaron graves violaciones al Reglamento Conjunto de la OGPe y el Reglamento 8858 del DRNA. “Se presentó evidencia contundente que demuestra la inclusión de información falsa o engañosa en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA). En particular, se denunció que el documento indica que el área de impacto directo del proyecto representa solo un 25% del terreno total. Sin embargo, análisis y evaluaciones presentadas por expertos durante las vistas señalan que el verdadero impacto se aproxima al 80%. Otra información falsa es la afirmación de que el proyecto garantizará acceso público a las áreas costeras. Según el propio documento, todos los accesos identificados son privados”.
En torno a la categorización del hábitat no se utilizó el método establecido por el DRNA.
“Al hacerlo correctamente el hábitat es de CATEGORÍA 3: DE ALTO VALOR ECOLÓGICO. También se presentó evidencia de que la DIA no aclara de dónde se obtendrá el agua necesaria para el proyecto, a pesar de que se trata de una zona con escasez comprobada de recursos hídricos. La disposición de desechos sólidos y la enorme amenaza al patrimonio arqueológico y a flora y fauna en peligro también fueron temas de amplia discusión. Por si fuera poco, el proyecto, según denuncias, incluye materiales incompletos, errores técnicos, imágenes manipuladas, mapas cuyas escalas son incorrectas y la inclusión en los planos de terrenos que no son propiedad de los desarrolladores”, se señaló.
“Ante esta abrumadora evidencia, ¡Defiende a Cabo Rojo! manifiesta que la Declaración de Impacto Ambiental, así como el proyecto “Esencia”, han sido rotundamente rechazados por el pueblo de Puerto Rico”, expresó el grupo.
“Este proyecto representa una amenaza significativa e irreparable para un área de alto valor ecológico, cultural y comunitario. Exigimos a la OGPe y a todas las agencias pertinentes que detengan de inmediato su trámite y que respeten tanto la voluntad del pueblo como el conocimiento colectivo presentado durante las vistas públicas”, apuntaron los opositores.
Tras las vistas, la coalición ha activado una jornada educativa y de movilización, con eventos presenciales y virtuales en el oeste, sur, área metropolitana y la diáspora. “Nos ha tocado actuar ahora porque nadie nos preguntó en qué momento histórico queríamos nacer, pero nacimos en este preciso y precioso momento para marcar la diferencia. Esta lucha es por la vida, por el ambiente, por Puerto Rico y por Cabo Rojo”, expresó una portavoz del colectivo.