Columna: Sin esperanzas el pueblo trabajador

Ivan Vargas Muñiz, líder obrero de la region Oeste.

Ivan Vargas Muñiz, líder obrero de la region Oeste.

Por: Iván Vargas Muñiz,  líder obrero del oeste y miembro de la UIA-AAA

No hay duda que los políticos durante sus campañas políticas hacen promesas que en la inmensa mayoría de ellas no van a poder cumplir. Pavimentar tal o cual carretera, crear empleos, no más impuestos, son algunas de las promesas que elección tras elección hacen los políticos para atraer el voto de la mayoría de los electores.

Sin embargo luego de salir electos, se les “olvida” lo que prometieron y se dejan llevar solamente por lo que ellos llaman programa de gobierno del partido, que en muchas ocasiones es distinto al paquete de ofertas que le hicieron al país.

Recordamos por ejemplo cuándo para la campaña para las elecciones del 2008, el Lcdo. Luis Fortuño Burset quien era en aquel entonces candidato a la gobernación del Partido Nuevo Progresista (PNP) repetía una y otra vez «al único que voy a despedir es a Aníbal Acevedo Vila, a más nadie», pero un mes después de ser gobernador  empezó a hablar que había que despedir 30,000 empleados públicos.

Se crea entonces la Ley 7 que tuvo como fin principal, despedir empleados públicos  (los 30,000 anunciados) y eliminarle derechos al pueblo trabajador, imponerle arbitrios al pueblo, etc. Luego vimos que se creó la Ley de las Alianzas Público-Privadas, que lejos de ser para crear empleos, su fin primordial era privatizar agencias. Lo vimos en el fallido intento de privatizar la AAA con una empresa colombiana.

El actual gobernador por el Partido Popular Democrático, Alejandro García Padilla no ha sido la excepción. Durante su pasada campaña prometió no reducir las pensiones de los empleados públicos, firmar el Convenio Colectivo de la UTIER, no más impuestos, pero sobre todo no gobernar para los bonistas.

La luna de miel de Alejandro García Padilla con los trabajadores no duró mucho tiempo.  Una de las primeras leyes que firmó fue reducirles las pensiones a los empleados públicos y a los que ya están retirados. Continuó con el Retiro de Maestros,  la Ley 66 que les reduce el Bono de Navidad a los empleados del gobierno y les elimina derechos adquiridos, se ha negado en todo momento a negociar con la UTIER, así como la imposición de aproximadamente 78 nuevos impuestos entre ellos la llamada “Crudita”, la cual ha sido impuesta en dos ocasiones en esta administración, encareciendo el precio del combustible.

Por las razones aquí mencionadas, este nuevo año el movimiento obrero debe comenzar a unirse, no en reuniones de salón, no en una u otra actividad, sino que hay que comenzar a crear un movimiento obrero robusto y fuerte que, no solamente vele por sus propios intereses,  sino que comience a luchar por las necesidades del pueblo en general del cual somos parte, de lo contrario estaremos destinados a desaparecer como movimiento organizado.

Por otro lado, lo que vemos para las próximas elecciones, no es distinto a lo que hemos visto en el pasado. Ya las promesas han empezado a fluir, pero como siempre las mismas están cimentadas en ver que hace el otro, para yo prometer lo contrario. Por lo tanto, el pueblo trabajador no tiene esperanzas de ser tomado en cuenta, si no se unen.